Aunque la comedia romántica es mi género predilecto en los k-dramas, si esta se encuentra dentro de una novela con matices históricos, usualmente paso de esta ya que dichas características iniciales acaban siendo ocultadas ante una historia con términos y avances pesados. Claro está, ese es mi punto de vista.
Así que siendo sincera, la razón principal por la que decidí darle la oportunidad a este dorama es porque un integrante de un grupo de k-pop que me gusta estaba ahí y este en actuaciones anteriores no me había decepcionado.
La trama es sencilla: a consecuencia de las deudas, Hong Ra On (la protagonista) es vendida para convertirse en Eunuco del palacio. Ya estando allí, ella intenta huir pero se encuentra con el Príncipe heredero; éste hará todo para evitar que Sam Nom (nombre falso de Ra On) deje el palacio y siga a su servicio. Pero se va interesando en "él" poco a poco sin saber aún su verdadera identidad, dando lugar a un amor prohibido que lo confunde y abruma. A su vez, dentro del palacio, los eruditos, oficiales y ministros liderados por el Primer Ministro Kim, padre de la actual Reina, mantienen su poder como clan y forman un complot en contra del Príncipe Heredero para evitar su ascenso como regente. Dicho complot, y graves sucesos del pasado que aún lo afectan, deberán ser enfrentados por el Príncipe Heredero con ayuda de sus pocos, pero leales aliados y Hong Ra On.
Para mi grata sorpresa, desde el primer capítulo quedé enganchada y conforme avanza la trama te encuentras que no solo se puede disfrutar de la historia de romance entre los protagonistas, sino también de los demás personajes y conspiraciones referentes al gobierno. Aparte cada personaje no está puesto al azar, tiene una importancia en algún momento ya sea de manera indirecta o directa. Los villanos te hacen odiarlos, los personajes buenos son inevitables de querer, mas hay algunos que están colocados en la zona gris mientras esperan ser reubicados a algún lado conforme los capítulos pasen.
Esta novela rompe con los clichés típicos de que el protagonista empieza siendo desagradable y mejora con el tiempo. Si bien es cierto que el príncipe da esa primera impresión, basta ver el pasar de las escenas para darse cuenta que es una percepción errónea. Me agradó el hecho de que más que interesado en defender su puesto como futuro rey, él buscaba que el gobierno favoreciera al pueblo, independientemente de si él acababa siendo la autoridad máxima, lo cual no resultaba una tarea fácil debido a que su padre -el rey- era claramente manipulado por sus ministros. A él nunca le toman el pelo, no cae ante las provocaciones ya que va un paso adelante y no proclama a los cuatro vientos sus planes. En el lado romántico tampoco se presta a seguir malentendidos, capta cuando la protagonista está en contra de él buscando protegerlo y en vez de ser un obstáculo, se hace a un lado y primero busca resolver la situación.
La protagonista por otra parte, aunque por momentos es descuidada, no es vulnerable en comparación de la usual contraparte femenina en estas series. Ella sabe lo que es vivir sola sin ayuda de otros, aparte de actuar rápido para salir de apuros. Se hace fácilmente querida y no causa irritación ante sus posibles errores, aún cuando llega un momento en que deja de actuar y empieza a llorar.
Y aunque tenemos también aquel quién se enamora de la protagonista, este personaje no da la usual lástima. Es más fuerte y presenta ciertas actitudes que por momentos hacen dudar de que lado juega, ya que aún cuando presta su ayuda, en algunas circunstancias guarda silencio ante lo ocurrido y a diferencia del príncipe, él no tiene problemas en realizar actos ilegales si es por un bien.
También tengo que hacer mención del guardia del príncipe y su más fiel amigo quién en soledad se ve envuelto entre la disyuntiva de seguir sus ideales o ir en contra del reino, recayendo en la posibilidad de acabar traicionando al príncipe y logrando una de las escenas más conmovedoras que he visto, la cual aparece en el capítulo 17 mostrando la verdadera magnitud de encontrarse entre la espada y la pared en contra de su propia voluntad.
Es cierto que una buena historia y buenos personajes no serían apreciados si no existiera una buena actuación. Y en este caso, aun cuando todos hacen una performance increíble, es el actor que encarna al príncipe quién se lleva mi atención. Sus expresiones tan transparentes se llevaron mi atención, podías ver como levemente sus sentimientos afloraban y cambiaban conforme la escena daba paso, como si fuera uno mismo quién estuviera en su propia piel.
Por estas razones queda de sobra decir que Moonlight Draw By Clouds superó mis expectativas, aunque lo único que me detiene de darle un puesto top, es debido al final que le dieron a la pareja que aun si fue realista, debió quedar claro. Salvo eso, no me genera arrepentimientos el haber visto los 18 episodios, haciéndome que me interese en los demás trabajos de los personajes principales.
Así que siendo sincera, la razón principal por la que decidí darle la oportunidad a este dorama es porque un integrante de un grupo de k-pop que me gusta estaba ahí y este en actuaciones anteriores no me había decepcionado.
La trama es sencilla: a consecuencia de las deudas, Hong Ra On (la protagonista) es vendida para convertirse en Eunuco del palacio. Ya estando allí, ella intenta huir pero se encuentra con el Príncipe heredero; éste hará todo para evitar que Sam Nom (nombre falso de Ra On) deje el palacio y siga a su servicio. Pero se va interesando en "él" poco a poco sin saber aún su verdadera identidad, dando lugar a un amor prohibido que lo confunde y abruma. A su vez, dentro del palacio, los eruditos, oficiales y ministros liderados por el Primer Ministro Kim, padre de la actual Reina, mantienen su poder como clan y forman un complot en contra del Príncipe Heredero para evitar su ascenso como regente. Dicho complot, y graves sucesos del pasado que aún lo afectan, deberán ser enfrentados por el Príncipe Heredero con ayuda de sus pocos, pero leales aliados y Hong Ra On.
Para mi grata sorpresa, desde el primer capítulo quedé enganchada y conforme avanza la trama te encuentras que no solo se puede disfrutar de la historia de romance entre los protagonistas, sino también de los demás personajes y conspiraciones referentes al gobierno. Aparte cada personaje no está puesto al azar, tiene una importancia en algún momento ya sea de manera indirecta o directa. Los villanos te hacen odiarlos, los personajes buenos son inevitables de querer, mas hay algunos que están colocados en la zona gris mientras esperan ser reubicados a algún lado conforme los capítulos pasen.
Esta novela rompe con los clichés típicos de que el protagonista empieza siendo desagradable y mejora con el tiempo. Si bien es cierto que el príncipe da esa primera impresión, basta ver el pasar de las escenas para darse cuenta que es una percepción errónea. Me agradó el hecho de que más que interesado en defender su puesto como futuro rey, él buscaba que el gobierno favoreciera al pueblo, independientemente de si él acababa siendo la autoridad máxima, lo cual no resultaba una tarea fácil debido a que su padre -el rey- era claramente manipulado por sus ministros. A él nunca le toman el pelo, no cae ante las provocaciones ya que va un paso adelante y no proclama a los cuatro vientos sus planes. En el lado romántico tampoco se presta a seguir malentendidos, capta cuando la protagonista está en contra de él buscando protegerlo y en vez de ser un obstáculo, se hace a un lado y primero busca resolver la situación.
La protagonista por otra parte, aunque por momentos es descuidada, no es vulnerable en comparación de la usual contraparte femenina en estas series. Ella sabe lo que es vivir sola sin ayuda de otros, aparte de actuar rápido para salir de apuros. Se hace fácilmente querida y no causa irritación ante sus posibles errores, aún cuando llega un momento en que deja de actuar y empieza a llorar.
Y aunque tenemos también aquel quién se enamora de la protagonista, este personaje no da la usual lástima. Es más fuerte y presenta ciertas actitudes que por momentos hacen dudar de que lado juega, ya que aún cuando presta su ayuda, en algunas circunstancias guarda silencio ante lo ocurrido y a diferencia del príncipe, él no tiene problemas en realizar actos ilegales si es por un bien.
También tengo que hacer mención del guardia del príncipe y su más fiel amigo quién en soledad se ve envuelto entre la disyuntiva de seguir sus ideales o ir en contra del reino, recayendo en la posibilidad de acabar traicionando al príncipe y logrando una de las escenas más conmovedoras que he visto, la cual aparece en el capítulo 17 mostrando la verdadera magnitud de encontrarse entre la espada y la pared en contra de su propia voluntad.
Es cierto que una buena historia y buenos personajes no serían apreciados si no existiera una buena actuación. Y en este caso, aun cuando todos hacen una performance increíble, es el actor que encarna al príncipe quién se lleva mi atención. Sus expresiones tan transparentes se llevaron mi atención, podías ver como levemente sus sentimientos afloraban y cambiaban conforme la escena daba paso, como si fuera uno mismo quién estuviera en su propia piel.
Por estas razones queda de sobra decir que Moonlight Draw By Clouds superó mis expectativas, aunque lo único que me detiene de darle un puesto top, es debido al final que le dieron a la pareja que aun si fue realista, debió quedar claro. Salvo eso, no me genera arrepentimientos el haber visto los 18 episodios, haciéndome que me interese en los demás trabajos de los personajes principales.
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